La ciudad de Londres cuenta con diversas zonas comerciales, algunas reconocidas por formar parte de los circuitos de compras más distinguidos del mundo.
Pero entre todas las opciones, en Londres hay 4 tiendas en particular, que son emblemáticas. Ya que están muy ligadas a la historia de la ciudad, y combinan tradición, arquitectura, singularidad, y un refinamiento que las hace únicas.
Aunque no vayas con la intención de hacer compras, vale la pena destinar un ratito para recorrerlas.
Harrods
En el corazón del elegante barrio de Knighsbridge, se encuentra la icónica Harrods.
La historia de Harrods, nace en 1835, cuando Charles Henry Harrod, funda un pequeño almacén, que en 1849 traslada a la zona donde se encuentra hoy. Con el negocio creciendo, empieza a adquirir las propiedades lindantes, hasta que en 1883, el complejo se incendia completamente. Esto le da la oportunidad de volver a construir el edificio de cero, con la escala que conocemos hoy, obra de Charles William Stephens.
Apenas entramos, nos recibe la escalera egipcia, la primera escalera mecánica del mundo. Cuenta la la historia, que los primeros clientes no se atrevían a subir por temor, entonces se les convidaba con un brandy, para animarlos.
Recorrer sus pisos y salones, nos traslada al extravagante lujo y la opulencia de tiempos pasados. En la planta baja, lujosas joyerías conviven con una gastronomía refinada. En amplios salones se exhiben la mejor selección de productos del mundo, listos para llevar, o para degustar en el lugar. En las plantas superiores, encontramos la moda de las grandes marcas y los salones dedicados a la decoración y al arte.
Harrods es una leyenda viviente (todavía). Y visitarla, es una experiencia ineludible.

Fortnum and Mason
Fortnum and Mason, en el centro de Londres, nos recibe con una alfombra roja.
Mucho más pequeña que Harrods, su historia se remonta a más de 300 años. Su atmósfera íntima y personalizada, le da un singular aire de distinción. Mientras recorremos sus salones, nuestros pies se hunden en alfombras mullidas, el aire huele deliciosamente perfumado, y una música suave sobrevuela el ambiente. Una exquisita decoración, modales cuidados, y una exclusiva selección de productos, completan la grata experiencia de recorrer esta tienda.
Aunque no exenta de controversias, Fortnum & Mason, ha sido proveedora de la realeza por más de 150 años.
La planta baja, está dedicada al té. Tés de todo tipo, origen, tamaño y embalaje, reposan sobre los anaqueles. También distintas variedades de miel, café, dulces, chocolates, galletas, y tartas completan el menú perfecto para el english afternoon tea. Y a decir verdad, nos dan ganas de llevarnos todo.
Otras plantas están dedicadas a arreglos florales, gastronomía, y selecciones exclusivas de objetos decorativos, sombreros, joyas, perfumería y papelería. Además la tienda cuenta con un spa, restaurante, y salones de té. Todo cuidadosamente presentado.
Liberty
En uno de los rincones más animados de Londres, encontramos la tienda Liberty. Tu nombre quizás te resulte familiar, porque de aquí nacieron los famosos estampados que llevan su nombre.
Fundada en 1875 por Arthur Liberty, comenzó siendo una pequeña tienda de adornos, telas, y obras de arte, que personalmente traía desde distintos puntos del mundo. Su exitoso modelo de negocio fue creciendo, hasta que con la adición de muebles y alfombras, para el año 1885, se había transformado en la tienda de decoración más exclusiva de Londres. Más tarde, en 1890, incorporaría la indumentaria.
La tienda Liberty, sirvió de referencia e inspiración a importantes diseñadores de la época, y tuvo una gran influencia, en el desarrollo el estilo Art Nouveau.
El edificio estilo tudor, tiene un encanto medieval, con escaleras y pisos de madera que crujen al caminar. El ambiente es más rústico que el de otras tiendas, pero no menos elegante.

Selfridges
Esta mítica tienda londinense, abrió sus puertas en 1909.
Su creador Harry Gordon Selfridge, era un personaje muy peculiar. Fue un hombre visionario, que introdujo un nuevo concepto de negocio de tienda de almacenes. Ideó estrategias de marketing que eran una novedad para la época, y que todavía hoy se siguen aplicando.
Además, Gordon Selfridge, tuvo una vida más que interesante. Hoy podemos ver su intensa vida y la de su familia, en la adictiva serie de Netflix Mr. Selfridge.
Selfridges fue nombrada la mejor tienda del mundo tres veces, y sus icónicas bolsas amarillas son inconfundibles en Oxford street.
Una visita obligada para los fans de la serie. Y si todavía no viste la serie, te la recomiendo!